Los instrumentos de percusión son una de las categorías más dinámicas, diversos y emocionantes dentro del mundo de la música. Estos incluyen todo desde la batería hasta los tambores africanos, y desde las maracas hasta los xilófonos. Sin embargo, uno de los instrumentos de percusión más conocidos y utilizados es el platillo.

Los platos se tocan mediante el impacto de dos discos de metal, generalmente hechos de bronce, aunque también pueden ser de otros materiales. El sonido de los platos se produce al vibrar el metal al ser golpeado, y estos pueden variar en tamaño y espesor para producir diferentes tonalidades y matices.

Los platos se pueden tocar de varias formas y con diferentes herramientas, como baquetas, escobillas, mazos o incluso con las manos. Cada una de estas técnicas produce un sonido distinto, y los músicos experimentados pueden hacer uso de estas técnicas para crear patrones rítmicos más complejos y expresivos.

En la música contemporánea, los platos a menudo se utilizan en conjunto con otros instrumentos de percusión, como la batería, para crear un sonido más completo y variado. También son apreciados por su capacidad para agregar dinámica y emoción a una canción, y pueden ser utilizados desde en música rock hasta en orquestas sinfónicas.

En resumen, tocar los platos puede ser un arte en sí mismo, requiriendo habilidad, técnica y creatividad para producir un sonido completo y expresivo. Pero, como uno de los instrumentos más populares en todo el mundo, es un instrumento que cualquiera puede disfrutar y apreciar.

¿Qué familia pertenecen los platillos?

Los platillos son instrumentos de percusión y pertenecen a la familia de los membranófonos. Esta familia de instrumentos se caracteriza por tener una membrana tensada que es vibrada para producir sonido.

Existe una gran variedad de platillos, cada uno con características únicas y sonido propio. Algunos de los más comunes son el hi-hat, el ride, el crash y el splash. Cada uno de ellos se utiliza de manera distinta en la música y se puede combinar con otros instrumentos de percusión o con los instrumentos melódicos.

Los platillos se han utilizado en la música desde hace muchos siglos. Los primeros registros de su uso se remontan a la antigua Persia, donde se utilizaban en ceremonias religiosas. Con el tiempo, los platillos se han ido integrando en diferentes géneros musicales, como el jazz, el rock, el metal y la música clásica.

En resumen, los platillos son instrumentos de percusión que pertenecen a la familia de los membranófonos. Existen muchos tipos diferentes de platillos y se utilizan en diversos géneros musicales. Su sonido único y versatilidad los hacen un elemento importante en cualquier conjunto musical.

¿Cuál es la función de los platillos?

Los platillos son uno de los instrumentos más importantes dentro de una batería. Su función principal es la de marcar los acentos de la música, además de reforzar el ritmo y la percusión. Estos instrumentos cuentan con diferentes tamaños y formas, siendo algunos más grandes y pesados que otros, lo que permite al baterista generar diferentes tonos y sonidos.

Uno de los principales usos de los platillos es en los solos de batería y en los pasajes más explosivos y ruidosos. En estos casos, se utilizan golpes fuertes y efectivos que se combinan con el resto de los instrumentos de la banda para generar una experiencia sonora única.

Además, los platillos también son importantes en los pasajes más suaves y delicados de la música. En estos casos, se utilizan golpes suaves y sutiles para generar un efecto atmosférico en la música. De esta forma, se logra crear un equilibrio perfecto entre los momentos fuertes y suaves en la música.

En resumen, los platillos son un elemento clave dentro de una batería y tienen una función importante en la música. Su uso y manejo adecuado permitirá a los bateristas añadir un toque personal a cada canción y mejorar su experiencia sonora. ¡No subestimes el poder de los platillos!

¿Cuál es el origen de los platillos?

Los platillos son una parte esencial de la cultura gastronómica en todo el mundo. Desde la comida rápida hasta los banquetes de alta cocina de restaurantes lujosos, los platillos están presentes en todas partes. Pero, ¿alguna vez te has preguntado de dónde provienen los platillos?

El origen de los platillos se remonta a la antigua China durante la dinastía Tang (618-907 d.C.). La gente en China usaba pequeños platos para servir la comida, que se les llamaba "círculos" o "platos que giran". Los platillos se convirtieron en una forma elegante de presentación de comida y pronto se extendieron a otras partes del mundo.

En Europa, los platillos se hicieron populares durante el siglo XVIII en los banquetes de la realeza. Los intérpretes más talentosos de las orquestas tocaban pequeños platillos llamados platillos suspendidos o "Crash Pots". Estos platillos se hicieron populares como instrumentos musicales, pero también se utilizaron para servir alimentos. Así, los platillos se convirtieron en una parte integral no solo de la música, sino también de la comida de lujo.

En la actualidad, los platillos se utilizan en todo el mundo para servir comidas variadas, incluyendo sushi japonés, mezze libanés y tapas españolas. La forma en que los platillos se sirven y se comen puede variar según la cultura y la ocasión. Por ejemplo, en España, se suelen compartir tapas mientras se socializa con amigos, mientras que en Japón, se considera una falta de educación dejar comida en un platillo.

En resumen, el origen de los platillos se remonta a la antigua China, donde originalmente eran utilizados como una forma elegante de presentar la comida. Después, se hicieron populares en los banquetes de la realeza europea durante el siglo dieciocho y hoy en día están presentes en muchas culturas y se utilizan para servir comida de todo tipo. ¡Seguro que la próxima vez que pruebes un platillo, lo disfrutarás aún más sabiendo un poco sobre su historia y origen!

¿Qué forma tienen los platillos?

Los platillos pueden tener diferentes formas según su función y origen cultural. En general, se pueden identificar tres principales:

• Platos hondos: su forma suele ser redondeada y profunda, permitiendo contener mayor cantidad de alimento líquido, como sopas, caldos, guisos o cremas.
• Platos llanos: su forma es plana y su borde ligeramente curvado hacia arriba, lo que permite contener alimentos sólidos, como carnes, verduras, ensaladas o arroces.
• Platos de postre: su tamaño es más pequeño que los anteriores y su forma suele ser redonda o cuadrada, con un borde liso y sin curvaturas, para preparaciones dulces como tartas, flanes o helados.

Además, existen otros tipos de platillos que se utilizan en ocasiones especiales o para presentar alimentos específicos de manera más estética, como los platos alargados para sushi, los platillos ovalados para carnes o pescados, los platos con secciones para una comida completa o los platillos decorados con motivos culturales o festivos.

Sin embargo, en la actualidad, gracias al diseño y la innovación, la forma de los platillos ha evolucionado permitiendo la creación de nuevas formas y materiales como platos cuadrados, triangulares, hexagonales y materiales como vidrio, porcelana, cerámica, madera, etc