Pitágoras es conocido por su importante contribución a la matemática, pero lo que mucha gente no sabe es que también se interesó por la música. De hecho, el matemático de la antigua Grecia creía que la música era una herramienta para alcanzar la armonía y la comprensión de las leyes universales.

Para Pitágoras, la música no era simplemente un conjunto de sonidos al azar, sino que seguía una estructura matemática. Según él, los sonidos se podían expresar como números y existían relaciones entre ellos que se podían calcular mediante fórmulas. Por lo tanto, la música tenía una base científica, y no era algo subjetivo y arbitrario.

Además, Pitágoras creía que la música tenía el poder de influir en las emociones y el comportamiento humano. Según él, ciertos tipos de música podían calmar la mente y mejorar la concentración, mientras que otros podían estimular la creatividad y la imaginación. Por lo tanto, la música era una herramienta útil para la educación y el desarrollo personal.

En resumen, para Pitágoras la música era una manifestación de la belleza y la armonía del universo, que a su vez podía ser estudiada y entendida mediante las matemáticas. Además, creía en el poder de la música para influir positivamente en la mente y el espíritu humano. En definitiva, Pitágoras veía en la música una forma de conectar con la esencia divina del universo y de nosotros mismos.